Ulan Bator, Mongolia. Al comenzar el tercer día de su histórico viaje a Mongolia, el Papa Francisco participó en un encuentro ecuménico e interreligioso en el Hun Theatre, junto a líderes budistas, chamanistas, ortodoxos rusos y otras más de 10 religiones diferentes.
En su mensaje, el Santo Padre aseguró que “las religiones están llamadas a ofrecer al mundo esta armonía, que el progreso técnico por sí solo no puede dar, porque, apuntando sólo a la dimensión terrena y horizontal del hombre, corre el riesgo de olvidar el Cielo para el cual hemos sido creados”
Por eso me alegra estar con ustedes en este importante momento de encuentro. Agradezco vivamente a cada uno de ustedes por su presencia y por sus diferentes intervenciones que han enriquecido la reflexión común. El encuentro y el estar reunidos en un mismo lugar ya es un mensaje. Si quien tiene la responsabilidad de las naciones eligiera el camino del encuentro y diálogo con los demás, sería una manera de poner fin a los conflictos que siguen causando sufrimientos a tantos pueblos.
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